sábado, 23 de julio de 2011

El profe dando una clase sobre Troilo y Cabral

Al comenzar a jugar al ajedrez en el Club Argentino en octubre de 1981 tuve como primer profesor al MF Gustavo Del Castillo. Al iniciarse 1982 se sumó el MF Eduardo Biagi quien, semana a semana, tiene la costumbre de deleitarnos a varios con sus largos y muy bonitos e-mails.

Edu Biagi en el centro vestido de blanco, rodeado de alumnos y dirigente de la Escuela de Club Argentino donde lamentablemente ahora se no cuenta con sus clases.

En esta ocasión he de tomar buena parte de su texto cuando se refiere a Aníbal "Pichuco" Troilo (tal vez el mejor bandoneonista de la historia) y al músico recientemente asesinado en Guatemala Facundo Cabral.
Pasemos pues a escuchar a mi amigo, el gran profesor y ahora relator de historias:

Facundo Cabral (22-V-1937 / 9-VII-2011) y Aníbal Troilo (11-VII-1914/ 18-V-1975) se conocieron una noche de aquella Buenos Aires de los setenta y el entrañable "Pichuco" se permitió darle una especie de consejo aporteñado/paternal que el propio Facundo gustaba contar así:

.

Hoy, 11 de julio, se celebra "El día del bandoneón" (en homenaje al inolvidable "Gordo" Troilo). Hace unos años, el cantante Raúl Lavié dijo en un reportaje radial:

Hace sólo unas horas, el talentoso bandoneonista Rodolfo Mederos visitó a Víctor Hugo Morales en Radio Continental y el periodista uruguayo/argentino, muy amante de la música, le hizo una pregunta que habrá sorprendido a más de un oyente:

, y la respuesta de Mederos coincidió con la de Lavié: <"Pichuco" tocaba hermoso y es muy difícil tocar lindo este instrumento>

"Pichuco" (simpatizante riverplatense de ley) falleció unos pocos meses antes que su amada "Banda Roja" volviera a dar la vuelta olímpica el 14 de agosto de 1975 después de casi 18 años de sufrida espera millonaria.

El sábado pasado ("Día de la Independencia") una de las personas más independientes y libres de nuestra bendita y querida Argentina le habrá avisado a "Pichuco" que no se preocupe por su querido River Plate, que todo anda muy bien por el "Monumental" ("Mentir es el principio de toda invención, de todo arte, de otra manera uno no podría considerarse un verdadero artista", solía decir Facundo) y juntos retomarán las charlas de aquella Buenos Aires del siglo XX.

(Si disponés de cinco minutos de tu valioso tiempo no dejes de buscar y leer el poema "Bandoneón" del uruguayo Mario Benedetti, dedicado a su admirado Aníbal Troilo).

Sobre Facundo Cabral sólo citaré dos párrafos de su excelente libro "Paraíso a la deriva" (, escribió Facundo en las primeras palabras del libro) de la Editorial Sudamericana-Planeta (publicado en el año 1985).

Para quienes solían sonreír al escuchar que al juglar solían decirle que era una especie de "profeta", les sugiero que lean con atención sus palabras publicadas hace un cuarto de siglo pero, quizás, meditadas mucho tiempo antes:

Al convertirse en un artista "exitoso" escribe Facundo en el libro citado anteriormente:

"Edu" Eduardo Biagi

Nada por agregar, a mi criterio, una clase más de mi profesor.

Alejo de Dovitiis © 2011

lunes, 11 de julio de 2011

Autocrítica de la Selección Argentina

Estaba por realizar una nota sobre el Mundial 82 en España pero me urge hablar de nuestra Selección.
Tras dos títulos mundiales en mayores: 1978 y 1986 más cinco en juveniles: 1979, 1995, 1997, 2001, 2005 y 2007 ha llegado la hora de parar la pelota y reflexionar.
Desde 1993 (última Copa América obtenida) solamente se ganaron dos Juegos Olímpicos en el 2004 y 2008 pero el nivel del fútbol argentino ha decaído.
Nadie puede negar los laureles de nuestro técnicos hasta la inesperada vuelta de Basile luego Maradona y posteriormente Batista. Sin embargo, desde hace décadas tenemos grandes jugadores pero no buenos equipos. ¿Por qué? Veamos posibles razones:
1) Los técnicos creen que por tener buenos futbolistas basta para obtener logros. Y siempre tienen dos o tres jugadores que forman parte de sus "caprichos".
2) Los jugadores toman a la Selección como una vidriera más que como un compromiso con el fútbol nacional y el fervor de la gente.
3) Los "europeos" ganan demasiado dinero como para venir a arriesgarse a una lesión jugado para la celeste y blanca.
4) A los dirigentes solamente les interesa cerrar buenos contratos para el representativo nacional sin tener en cuenta el fuste del rival y si esos matches van a ser una verdadera prueba para el equipo.
5) A los periodistas les interesa mostrar todas las miserias de puertas adentro cuando el equipo va mal y todas las "rosas" que supuestamente se tiran cuando el conjunto viene bien.
6) A los hinchas nos interesa ganar y solemos decir que fulanito "no siente la camiseta" o matar a algún Redondo cuando se sincera y dice que no quiere jugar en la Seleección. ¿No es preferible eso a los qué viene realmente por compromiso?
Podría enumerar mil razones más pero creo que sean unas u otras lo cierto es que el tiempo pasa y generaciones de muy buenos jugadores han pasado de largo sin pena ni gloria.
¿Nos ocurrirá lo mismo con Messi, Tévez, Higuaín etc etc? Dios quiera que no, ya que nadie de otras latitudes sabe responderse porque Argentina, con semejante poderío, tiene actuaciones tan pobres.
¿Será que somos buenos para el fútbol pero malos para integrarnos y trabajar en equipo? ¿Qué la suma de 1+1+1 en vez de dar 11 da menos?
¡¡Dejemos el pensamiento mágico todos!!
Dirigentes (Grondona léase): hagan proyectos a cuatro años con partidos de entidad para la selección y volviendo a dar prioridad a los Juveniles.

Técnicos: sean capaces de dirigir la Selección o al menos de presionar a la AFA para que se elija uno de los más capacitados y no los amigos del presidente.

Jugadores: No es obligatorio jugar en la Selección Nacional pero, si lo hacen, deben dejar todo. La grandes de cada uno estará dada no sólo por lo que realicen en sus clubes sino por el desempeño en el conjunto nacional.

Periodistas: Dejen el chiquitaje del negocio pequeño y dedíquense a informar y criticar constructivamente. ¡Basta de alabar jugadores porque me conviene o a otros castigarlos porque nada saco con él! Que los representantes hagan sus negocios pero fuera del seleccionado, por favor.


Hinchas: Seamos un poco más objetivos, banquemos a la Selección y pasemos de la gloria al infierno. Messi no es Maradona pero no tiene un funcionamiento de equipo que lo potencie. Tenemos mil delanteros pero pocos mediocampistas. Es creer que por milagro la pelota llegará al área rival y "alguien la va a meter". Confiemos en Lío y pidamos que el equipo se arme en torno a él y no que él deba acomodarse a un esquema anodino, sin plan y totalmente voluntarista que ya dio muestra de su ineficacia en el Mundial 2010.

Estamos ante un partido crucial de una Copa América, que aún se puede obtener, pero es hora que aparezca el espíritu de equipo y la garra que nos caracteriza sin perder el buen fútbol que -producto de muy malos planteos- brilla por su ausencia.
¡¡Vamos Argentina, arriba Selección!! Vayamos partido por partido volviendo a ser un equipo, una verdadera Selección con 42 millones de almas detrás.